En marzo de 2018 cuando saltó a la luz el escándalo de Cambridge Analytica y Facebook, se pusieron sobre la mesa repentinamente un gran número de cuestiones que se pasaban por alto respecto a las redes sociales. Estas cuestiones tomaron relevancia a tal punto que, como en la vida misma, comenzaron movimientos de “indignados” para borrarse de Facebook (#DeleteFacebook).
Entendamos cómo ocurrió esto, por qué pasó y cuáles son las alternativas para que no vuelva a suceder.
¿Cuánto ocupan las redes sociales nuestra vida?
Las estadísticas son muchas veces brutales y nos permiten abstraernos por momentos de nuestro pequeño micromundo cercano. Las redes sociales, que comenzaron a ser populares apenas algunos años atrás hay llegado a números inimaginables. En el año 2016 ya habían superado los 2,000 millones de usuarios y por supuesto que la más popular era Facebook con 1,860 millones de usuarios activos por mes. ¡Esto es más que toda la población de China! Hay otras redes sociales, algunas de ellas que han sido adquiridas, o copiadas por Facebook (tocaré este tema más adelante) como, por ejemplo: WeChat, Twitter, Instagram, y Tumblr. Sorprendentemente el Norte y Sur de América están en el primer y segundo lugar de penetración de redes sociales, siendo predominantemente el acceso a través de los móviles.
¡El gráfico muestra datos de una encuesta online realizada por Statista, con los minutos por día promedio que se invierten en las redes sociales (todas) desde el año 2012 hasta 2017!
Pasamos horas al día en las redes sociales y muchos se preguntan, donde hacen dinero estas empresas que son multimillonarias y sus dueños superaron las riquezas de creadores de empresas de ladrillos y no tenemos que pagar por utilizarlas.
¡Son lo datos estúpido!
Las redes sociales y todos aquellos gigantes de internet, como por ejemplo Google, Skype, Paypal, Mercado Libre y sigue la lista, son servicios gratuitos cuya compensación son nuestros datos. A mayor tiempo invertido en sus productos, mayor es la recompensa de información que les dejamos.
Desde tiempo inmemoriable la información fue valiosa, pero con los avances de la tecnología y herramientas de Inteligencia Artificial y Machine Learning se pueden manipular datos masivos (gigantescos volúmenes de información) de manera rápida y encontrando patrones que ayudan al objetivo de las empresas que son dueñas de estos datos. Las empresas dueñas de la telefonía móvil pueden conocer en que lugares físicos estamos todo el tiempo por la conexión con la antena de nuestro móvil, o por ejemplo los bancos conocen los lugares donde compramos, y hasta los supermercados a través de sus programas de beneficios con las tarjetas de compra o afinidad conocen las marcas y productos que compramos y podrían hasta hacernos una radiografía de nuestro consumo en calorías.
En esto hay que ser cauto y no necesariamente desesperarse por cómo se esparcen nuestros datos, sino más bien conocer en donde estamos dejando nuestra información y la confiabilidad del receptor de esos datos.
En Argentina se creó la “Agencia de Acceso a la Información Pública” hace varios años y desde el 2013 reconocida a nivel internacional con el objetivo de ser el Órgano de Control para la efectiva protección de los datos personales. Ante éste ámbito se puede hacer una denuncia y éste investigará para qué contiene datos esa base y cual es su fin. Posteriormente se puede hacer una acción judicial de Habeas Data para conocer los datos personales almacenados y la finalidad de los mismos.
Esta es tu vida digital
La primer piedra, fue tirada allá por el año 2007 cuando dos psicólogos de la Universidad de Cambridge, Michal Kosinski y David Stillwell comenzaron a hacer estudios en Facebook de la personalidad a través de una aplicación llamada “myPersonality”. Esta investigación permitió determinar género, edad, sexo, y abrió las puertas para considerar distintos métodos para relacionar los “likes” con rasgos de la personalidad.
Varios se interesaron en esta investigación y las derivaciones de la misma, como por ejemplo en aspectos de la política y correlacionar “likes” con gustos políticos. Aleksandr Kogan, Profesor de neurociencia de la Universidad de Cambridge dijo que podía replicar lo que Kosinski había hecho en “myPersonality” y construyó la aplicación en Facebook llamada “thisisyourdigitallife” (en español “Ésta es tu vida Digital”). A partir de este momento comienza una nebulosa de empresas que van y vienen en búsqueda del preciado tesoro y donde se mezcla la política.
El primer hito de su aplicación fue que 270,000 usuarios de Facebook voluntariamente aceptaron bajar la aplicación y hacer el cuestionario. Pero, la magia estaba detrás de esto porque en los términos y condiciones al momento de suscribir indicaban que permitía obtener información de sus amigos, lo que expandió a través de las redes hasta un total aproximado de más de 50 millones de perfiles.
La democracia y la información
Cambridge Analytica había tomado 30 millones de perfiles y había podido hacerle un perfil psicológico adecuado, según la empresa. El paso que seguía era combinar esa información con los registros de votantes en Estados Unidos, y otros recursos que permitían enviar avisos publicitarios específicos en base al perfil identificado tanto para influir en su voto como así también para recabar fondos para la campaña como donaciones y mapear geográficamente donde el candidato tenía más apoyo. Todavía no se ha determinado cómo se realizó esto y el congreso de Estados Unidos ha citado al CEO de Facebook Mark Zuckerberg a comparecer el día 9 de abril de 2018.
Tanto Kogan como Facebook afirman que la información que obtuvieron de los perfiles es legítima y legal, pero lo que indican es que Kogan utilizó la información vendiéndosela a un tercero y quebrantando las reglas y contratos firmados con Facebook. Hubo una auditoría de Facebook para confirmar que los datos se habían “borrado”, cuando realmente ahora se puede comprobar que los datos pasaron de manos de Kogan a Cambridge Analytica.
Ahora, se puede inferir que Facebook desconocía que se podía acceder a información de perfiles más allá de los que aceptaban utilizar la aplicación en cuestión. En una nota en Infobae, Alexandra Samuel declaró que era conocido en el ambiente de marketing que aspirar información de los “amigos” de las personas que bajaban una aplicación y llamó “la fiebre del oro de los datos tomados de redes sociales”. También citan el caso de la empresa Microstrategy, que creo una aplicación en Facebook llamada Wisdom que con 52,600 personas que la instalaron llegaron a “aspirar” datos de más de 17 millones de personas a un promedio de 332 amigos de los que instalaron la app.
Borrar Facebook es una opción
Cómo en la vida misma, están los que “aman” las redes sociales y aquellos que las “aborrecen”. Pero la privacidad de los datos y todo el escándalo con Cambridge Analytica no hizo más que revivir el movimiento #DeleteFacebook. Éste movimiento se encontró con el mejor momento para ir a la carga con este caso. Y si bien he escrito sobre la adicción a las redes sociales y como los gigantes de tecnología están siendo atacados por organizaciones sobre la “adicción” de sus productos, la realidad es que Facebook es un monopolio.
Para los miles de millones de usuarios que tiene Facebook, la realidad es que no hay otra opción a la vista.
Por otro lado, Facebook se preparó desde sus comienzo para evitar esta huida de su red social de diversas maneras. Desde barrer a sus competidores, como por ejemplo copiando o comprando, ha hecho que en estos últimos 14 años de vida se preparó de manera notable para un movimiento de este tipo. Zuckerberg dijo al NYTimes que no ven un número grande de personas borrando sus cuentas, pero “no es bueno”.
Entonces, si todavía no has borrado tu cuenta de Facebook te sugiero los siguientes pasos:
- Editá la privacidad de tu cuenta en Facebook.
- Revisá las aplicaciones que están conectadas con tu perfil de facebook.
- Controlá la privacidad de las aplicaciones que quieres que sigan conectadas a tu perfil.
¿Y ahora que va a pasar con Facebook?
Existen al momento, al menos 4 demandas colectivas de usuarios y accionistas por la filtración de Cambridge Analytica, así como también una investigación de la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos con posibles multas millonarias para Facebook.
Mark Zuckerberg testificará ante el congreso de EE.UU. el 11 de abril a las 11 de la mañana. El objetivo de esa reunión es poder entender como se maneja la privacidad de los datos de los usuarios y ayudarnos, a los usuarios, a entender que pasa con la información personal que se comparte con Facebook.
La realidad es que ni la gente, ni las empresas quieren ser reguladas por los gobiernos, pero es necesario que seamos protegidos. Tal como los gobiernos protegen a los ciudadanos con los remedios o alimentos, hoy se ha agregado un nuevo elemento que es la información o datos en un mundo digital. La protección de la gente es ahora la protección de datos y los gobernantes deben actualizarse hacia este nuevo paradigma.